Jabón de Lavanda

Bienvenidos a La Provenza.

Un clásico, ese es el jabón de Lavanda. Su aroma inconfundible evoca olores a campo, recuerdos de abuelas ligeramente perfumadas, saquitos de tela escondidos por sabias manos entre blancas sábanas y suaves toallas desprendiendo sobre ellas toda su esencia. Y otros tantos recuerdos de tiempos pasados hace su aroma aflorar en nuestra mente.

Propiedades del Jabón de Lavanda.
Apropiado para casi todos los tipos de piel y problemas dermatológicos. La Lavanda posee múltiples propiedades: antiséptica, antiinflamatoria, fungicida, cicatrizante, desodorante y repelente de insectos entre otros. Éstas propiedades le confieren utilidad en caso de: acné, abscesos, quemaduras, pieles congestionadas, cortes y llagas, pieles secas y sensibles, eczemas, pieles irritadas e inflamadas, psoriasis, erupciones cutáneas, cicatrices y estrías, heridas, arrugas y piel madura.

Otros componentes:
- Aceite de Jojoba: Hidrata, suaviza, tonifica y revitaliza todos los tipos de piel. Trata las arrugas por lo que resulta muy útil en caso de piel envejecida. Equlibra la producción de sebo en las pieles grasas, actuando en caso de espinillas y puntos negros. Cuida las pieles secas y sensibles. Antiinflamatorio, ejerce su acción contra las radiaciones solares.
- Aceite de Almendras Dulces: Hidrata suaviza y nutre y da elasticidad a la piel, en especial las pieles secas, sensibles, envejecidas o con presencia de descamación o deshidratación. Muy beneficioso en caso de estrías o arrugas.
- Manteca de Karité: Regenerador celular natural con propiedades hidratantes, suavizantes y reestructurantes. Aporta tersura y elasticidad a la piel siendo muy beneficiosa en caso de arrugas y estrías.

Ingredientes del Jabón de Lavanda: Aceite de Oliva, Coco y Palma. Aceite de Ricino. Aceite de Almendras Dulces. Aceite de Jojoba. Manteca de Karité. Aceite esencial de Lavanda. Menta. Pachulí.